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No hay perdón para Jerusalén

12 Isaías dijo:

«El Dios todopoderoso les aconsejó
que debían ponerse a llorar
y vestirse de luto en señal de dolor.
13 Pero ustedes hicieron fiesta
y se llenaron de alegría;
comieron carne y tomaron vino,
y dijeron:
“Comamos y bebamos
que mañana moriremos”.

14 »Por eso Dios me dijo al oído:
“Yo soy el Dios todopoderoso,
y nunca les perdonaré este pecado”».

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